​Impotencia y profunda tristeza ha ocasionado en el equipo de la Ong “Chiloé Silvestre” el mortal ataque que sufrieron dos pudúes que formaban parte del Centro de Conservación de la Biodiversidad en Ancud.

El hecho quedó al descubierto la mañana del sábado cuando el grupo humano iniciaba sus actividades comprobando que un perro había ingresado durante la noche hasta el recinto atacando a los pequeños ciervos residentes.

Así lo relató el médico veterinario y presidente de la Ong, Javier Cabello que mediante un comunicado visiblemente afectado señaló que “durante la madrugada de ese día y previo al inicio de nuestras actividades un perro invadió nuestras dependencias rompiendo varios recintos para ingresar y atacar a dos ejemplares de pudú residentes Pudini y Pullü, lamentablemente ninguna de ellas sobrevivió al ataque”.

 “Pudini era nuestra corazón, el espíritu de Chiloé Silvestre, llegó el 2017 con apenas un mes de vida cuando iniciamos nosotros también nuestro Centro de Rehabilitación, es así que crecimos junto a ella”, contó el veterinario.

La otra ejemplar procedía desde otro centro y estaba en proceso de adaptación con su par siendo las principales atracciones para niños y adultos que llegaban hasta este espacio destinado a la rehabilitación y cuidado de la fauna silvestre. 

El hecho fue denunciado a Carabineros a partir de la responsabilidad que le cabe a los propietarios de los perros causantes de este repudiable ataque.